Las prácticas éticas de experimentación animal han hecho que la producción de anticuerpos in vitro mediante cultivo de hibridomas en el laboratorio gane cada vez más terreno frente a la tradicional producción in vivo a partir de líquido ascítico.

A pesar de los más que destacables avances en las técnicas de producción de anticuerpos in vitro, es frecuente que en ocasiones surjan dificultades como el bajo rendimiento, muerte celular, contaminación de los cultivos y/o problemas de escalabilidad, entre otros.

Con el fin de resolver y optimizar estas cuestiones, hoy os traemos esta entrada con algunas claves para la producción de anticuerpos in vitro.

 

Claves para la producción de anticuerpos in vitro

1.- Optimización del medio de cultivo

Cada hibridoma responde de manera diferente a un determinado medio de cultivo, que influirá directamente en el crecimiento celular, y por extensión, en la calidad y rendimiento del anticuerpo producido.

Los factores más importantes a tener en cuenta a la hora de seleccionar el medio de cultivo para los hibridomas son:

  • Los medios de cultivo que contengan nutrientes y aditivos como factores de crecimiento, inhibidores del crecimiento, factores autocrinos, nucleótidos cíclicos, etc. pueden incrementar la producción de anticuerpos in vitro.
  • En algunos casos, una forma de estimular la producción de anticuerpos in vitro es el uso de medios de cultivo que generen alta presión osmótica.
  • La generación de subproductos metabólicos puede reducirse utilizando medios de cultivo con bajas concentraciones de glucosa y glutamina. De esta manera se prolonga la viabilidad celular, mejorando el rendimiento.
  • La producción de anticuerpos in vitro también puede potenciarse mediante medios de cultivo ricos en aminoácidos.
  • Para optimizar la acción del medio de cultivo seleccionado y mejorar así los niveles de producción de anticuerpos in vitro, es necesario definir las condiciones físico-químicas adecuadas en cada caso, incluyendo pH, temperatura, y niveles de oxígeno y CO2.

 

2.- Optimización del sistema de producción de anticuerpos

En función de los recursos disponibles, la escala de producción y la cantidad de anticuerpo que se necesite, se puede optar por distintos sistema de producción de anticuerpos in vitro.

Veamos las características que ofrece cada uno de ellos:

 

  • Cultivo por lotes

En este caso, los nutrientes se añaden una única vez al inicio del cultivo, y cada lote es procesado de manera independiente.

  • Características:
    • Método de elección para la producción de anticuerpos in vitro a pequeña escala.
    • El procedimiento es sencillo, y relativamente rápido (3 semanas) y económico.
    • El rendimiento no suele superar los 20ug/mL.

 

  • Cultivo continuo

En esta modalidad, los nutrientes se van añadiendo a medida que se consumen y permite trabajar en base a un cultivo continuo.

  • Características:
    • Al trabajar con mayor densidad celular, con este método se obtiene un mayor rendimiento.
    • Utilizan menor cantidad de medio.
    • Requiere equipamiento más caro y una monitorización más continuada.

 

  • Cultivo de perfusión

En este caso, el medio con los nutrientes se hace circular sobre las células a través de una membrana semipermeable.

  • Características:
    • Método de elección para la producción de anticuerpos in vitro a gran escala.
    • Requiere mayor inversión en equipamiento.
    • El rendimiento que se obtienen es mucho mayor que con cualquiera de los otros métodos, ya que la densidad celular que se consigue es muy superior. Puede alcanzar hasta 1mg/mL.

 

 

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